AMA Y RESPETA PARA SER AMADO Y RESPETADO.

No puedes amar a nada ni a nadie a menos que antes lo respetes. La primera persona que merece tu respeto eres tú. Para recuperar el respeto por ti mismo, hazte la pregunta: ¿qué respeto en mí?. Para respetar a los demás, incluso a las personas que te desagradan, pregúntate: ¿qué respeto de ellos?. Recuerda que las personas que te desagradan reflejan inconscientes cosas de ti que te desagradan, por tanto, no trates de cambiarlos a ellos sino a ti. Un proverbio chino dice: antes de salir a salvar el mundo dale tres vueltas a tu casa. El respeto es esa calidad humana que tanta falta hace últimamente, no solo en los mexicanos sino también en los habitantes de este planeta.